Hemos oído hablar de estilo nórdico, yo también lo voy a hacer, porque me apasiona. El blanco ese color neutro, limpio, elegante que con un toque de color aumenta su esplendor. Si vamos a elegir una estancia nueva podemos apostar por él, pero también lo podemos hacer si queremos rediseñar con muebles alguna estancia que ya tenemos como por ejemplo: un perchero, un estante, una mesa auxiliar...
En la casa, cada estancia es importante, por eso a la hora de elegir yo apostaría por el blanco, porque da una sensación de amplitud, ideal para casas chicas como estamos acostumbrados a ver. El color blanco aporta luminosidad, tus espacios quedarán como más abiertos y te aportarán un mayor confort, esto te ayudará a recrearte en el dormitorio, el comedor, la cocina o en un rinconcito exterior de la casa.
Parece que oír "nórdico" te refresque, ¿no?, pues ahora que vamos a pasar al verano lo que queremos es abrir la casa para que pase el aire fresco, llenar los balcones y terrazas con flores, plantas y buscar el sitio ideal en la terraza para una mesita y una silla con la que sentarse a leer, tomar el sol, tu primer café del día...y todo pensando en blanco.
Parece que oír "nórdico" te refresque, ¿no?, pues ahora que vamos a pasar al verano lo que queremos es abrir la casa para que pase el aire fresco, llenar los balcones y terrazas con flores, plantas y buscar el sitio ideal en la terraza para una mesita y una silla con la que sentarse a leer, tomar el sol, tu primer café del día...y todo pensando en blanco.
Puede que comprar no esté en tu mente, no te preocupes, siempre puedes recrear tu ambiente nórdico, por ejemplo en tu dormitorio: pinta las paredes en blanco, añade una colcha en blanco, decora en blanco y zas tu antiguo dormitorio se acaba de convertir en nórdico...
No te conformes, aprovecha el verano y dale un nuevo estilo a tu casa.
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